En realidad no he estado todo este tiempo de vacaciones pero la vuelta a la rutina también requiere su tiempo.
Ahora es tiempo de añorar esos maravillosos días de descanso y diversión. De disfrute de la familia y los amigos.
Tiempo de planes y de nuevos propósitos.
Tiempo de volver a la normalidad y de disfrutar también de ella, por qué no.
Y que mejor forma de volver a la rutina con el blog que con la receta mensual que propone el CKW.
Whole Kitchen en su propuesta dulce para mes de septiembre, nos invita a preparar un postre clásico británico: CRUMBLE
El crumble, es un pastel clásico inglés, elaborado con fruta y cubierto por una especie de costra de migas, la cual se realiza mezclando, harina, mantequilla y azúcar y/o sal.
Es un postre muy rico y muy fácil de preparar.
Generalmente yo lo preparo acompañando una tarta de chocolate con manzana o pera. Podéis ver la receta de esta tarta aquí.
Pero merece la pena probarlo de forma tradicional, sobre todo por la rapidez con la que se lleva a cabo y porque los ingredientes son los básico de cualquier cocina.
Se sirve templando por lo que es ideal para tomar en otoño-invierno y se puede acompañar de natillas, helado o alguna compota.
Aprovechando la temporada de higos (me encantan), he preparado para la propuesta del CKW un CRUMBLE DE HIGOS.
Y esta es la receta:
Para dos personas (en un recipiente)
8 higos
1/4 de taza de pasas
2 cucharadas de miel
3 cucharadas de zumo de naranja
75 grs de mantequilla
150 grs de harina (todo uso)
15 grs de copos de avena
15 grs de azúcar
Como se hace:
En un bol ponemos las pasas y el zumo de naranja y las dejamos macerar media hora, o si tenemos prisa les damos un golpe de microondas ( 30-40 segundos)
Encendemos el grill del horno.
Lavamos y cortamos por la mitad los higos y los colocamos en un recipiente apto para el horno.
Añadimos las pasas y el zumo sobrante sobre los higos.
Vertemos las dos cucharadas de miel sobre la fruta.
En un bol aparte, ponemos la harina, el azúcar y los copos de avena y mezclamos.
Añadimos la mantequilla fría cortada en dados y con los dedos la frotamos con la mezcla de la harina hasta obtener unas migas gruesas.
Colocamos las migas sobre la fruta e introducimos al horno el recipiente en la zona entre baja y media del horno para que se dore lentamente.
Aproximadamente 15 o 25 minutos o hasta que esté dorado al gusto.
Feliz semana!