miércoles, 11 de enero de 2012

Tarta de chocolate y cerveza Guinness

Con los ojos en blanco me quedé yo el día que vi por primera vez esta tarta en un blog. Ni siquiera recuerdo cual fue porque aquella imagen me dejó en shock. Solo recuerdo que leí que la receta era de Nigella Lawson, me parece que de su libro "Feast".
Libro que, por cierto, tenía en la lista de pendientes y que de momento seguirá ahí porque con los dos que me acabo de comprar de ella (en inglés) tengo para una temporadilla.



El caso, es que es de esas recetas que se te graban a fuego y en las que viendo una foto y sin probarla ya te atreves a jurarle amor eterno.

Oh, my god! que cosa más rica. Es la típica tarta que uno empieza pero no sabe cuando podrá parar de comer "otro trocito". Me encantó. Ese punto que le da la cerveza negra de humedad es delicioso. Aunque aviso, para decepción de unos y regocijo de otros, la cerveza no le da ningún sabor, si bien es cierto que si potencia el sabor del chocolate.


Fue la elegida para una celebración familiar y por los comentarios, creo que fue todo un éxito. En casa ya me han pedido "que lo repita, que lo repita, que lo repita", así que no creo que tarde en ponerme a ello. A mí me conquistó.



Bien, vamos con la receta, porque seguro que más de un flechazo habrá surgido ya...

INGREDIENTES:

Para el bizcocho

250 grs de harina de repostería (no leudante)
400 grs de azúcar
250 grs de mantequilla
250 ml de cerveza negra Guinness Stout
75 grs de cacao en polvo (sin azúcar)
140 ml de nata para montar
2 huevos
1 cucharadita de esencia de vainilla
2 y 1/2 cucharaditas de bicarbonato

Para el frosting

350 ml de nata para montar
300 grs de queso crema (tipo Philadelphia)
150 grs de azúcar glass



COMO SE HACE


Precalentamos el horno a 180º.

En una cazuela ponemos a calentar la cerveza negra. Cuando esté caliente, sin que llegue a hervir, añadimos la mantequilla y dejamos que se derrita. Retiramos del fuego y reservamos.

En un bol grande, porque luego añadiremos los ingredientes líquidos en él, mezclamos el azúcar, el cacao, la harina y el bicarbonato hasta que estén completamente integrados y la mezcla sea de un solo color.Reservamos.

En otro bol mezclamos la nata, los huevos y la vainilla hasta que quede una mezcla homogénea.

Después añadimos la mezcla de la cerveza-mantequilla y volvemos a mezclar todo bien.

Esta mezcla de los ingredientes líquidos la iremos añadiendo al bol de los ingredientes secos (harina, azúcar, etc) mientras mezclamos con unas barillas hasta obtener una masa bastante líquida y sin grumos.

Vertemos la mezcla en un molde, previamente engrasado y horneamos durante 50 minutos aproximadamente.

A mí, con estas cantidades me sobró un poco de masa que usé para hacer unos cup cakes.

Mientras el bizcocho se hornea podemos aprovechar para preparar el frosting.

Para prepararlo yo pongo la nata muy fría, el azúcar y el queso en un bol y lo bato hasta que monte bien.
Una vez preparado, lo tapamos y lo guardamos en el frigo hasta el momento de usarlo.



Una vez horneado el bizcocho lo retiramos del horno y lo dejamos enfriar en el molde. Luego lo desmoldamos con cuidado y ya frío lo decoramos con el frosting en la parte superior.



Si te has enamorado de él, no tardes en hacerlo, no te decepcionará.

Feliz semana!